El amianto, también conocido como uralita, fue un material ampliamente utilizado en la construcción durante el siglo XX debido a su resistencia y bajo coste. Sin embargo, hoy sabemos que es altamente peligroso para la salud. En España, el desamiantado está regulado por una estricta normativa para garantizar la seguridad de las personas y el medio ambiente.
En los proyectos de demolición, la gestión del amianto es un aspecto crucial que no puede ser ignorado. Este material, presente en muchas construcciones antiguas, representa un riesgo significativo tanto para la salud como para el medio ambiente. Por ello, el desamiantado es un paso esencial que debe realizarse con procedimientos seguros y conforme a la normativa vigente.